NOVIEMBRE 2016
Doce son, las uvas, las campanadas y lasclaves del vino en 2016
A punto de concluir el año 2016, llega el momento de hacer una breve semblanza de lo que fue y, sobre esta base, proyectar lo que está por llegar, haciendo las mejoras, correcciones, observaciones o modificaciones que tengamos por conveniente. Así las cosas, y después de consultar algunas fuentesen el sector del vino, como son el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), la Federación Española del Vino (FEV) y la propia web de Enominer, las doce claves elegidas en el sector del vino en 2016 para hacerse una idea rápida de su contorno y su estado son las siguientes:
Una.-Nuevo sistema de Autorizaciones de plantaciones de viñedo. Desde el día 1 de enero de 2016, y por mor de la Unión Europea (UE), el régimen de Derechos de Plantación existente hasta el 31 de diciembre de 2015 se convierte en un sistema de Autorizaciones de Plantación. Así pues, para poder plantar viñedo, es requisito sine qua non contar con una Autorización que ha de obtenerse a través de algunas de las figuras siguientes: a) Autorización para nuevas plantaciones; b) Autorización para Replantaciones y c) Autorización por Conversión de Derechos de Plantación.
Para arrancar un viñedo es necesario presentar una solicitud a la Comunidad Autónoma (CA) donde se ubique el mismo. Previas las comprobaciones oportunas, la CA otorgará una resolución de Arranque. En cuanto a las plantaciones, no es posible plantar un viñedo sin la autorización correspondiente de la CA y, en caso de hacerlo, deberá arrancarse la plantación y, además, será objeto de sanción tal hecho, no permitiéndose la compra-venta de autorizaciones. Antes del día 1 de febrero de cada año, el MAPAMA puede publicar las limitaciones o restricciones para plantar en algunas Denominaciones de Origen Protegidas e Indicaciones Geográficas Protegidas (IGPs), circunstancia que deberá tenerse en cuenta al solicitar la autorización para plantar viñedo.
Dos.-Estimaciones sobre la producción mundial de vino. La OIV ha vaticinado para el año 2016 una sensible disminución del 5 % sobre 2015, y una de las más escasas de los últimos 20 años debido a los eventos climáticos producidos a nivel global, situándose la producción total en 259,4 millones de hectolitros.
Tres.- Precio medio del viñedo. El precio medio del cultivo del viñedo en España se sitúa en 15.127 € / hectárea (ha). Por tipo de viñedo, el de secano seencuentra en 14.010 € /hectárea y el de regadío, con un aumento del 0,60 %, asciende a 19.160 € / ha. Por Comunidades Autónomas (CCAA), los precios medios más elevados se encuentran en las Islas Canarias (77.433 € / ha), siendo el más económico el correspondiente al de Murcia (5.238 € / ha).
Cuatro.- Evolución de la superficie plantada de viñedo. Desde el año 2001 la superficie de viñedo plantada en España viene reduciéndose, lentamente, año tras año. Con los datos de la última campaña vitivinícola cerrados al 31 de julio de 2016, la superficie entre los dos períodos comparados va desde 1.124.433 ha en 2001 a 959.335 ha en 2016, al 31 de julio. Respecto a los derechos de plantación inscritos en el Registro Vitícola de las CCAA, sin convertir en Autorizaciones a fecha 3 de julio de 2016, suman un total de 36.624 ha.
Cinco.- El Potencial Vitícola Español. El potencial vitícola español al 31 de julio de 2016, suma la cifra total de 1.013.011 hectáreas. El potencial vitícola está compuesto por la suma de los componentes siguientes: Superficie plantada de viñedo (959.335 ha), más los Derechos de plantación sin convertir en Autorizaciones (36.624 ha), más Autorizaciones concedidas de nueva plantación (4.173 ha), más Autorizaciones para Replantación concedidas del 01.01.2016 al 31.07.2016 (387 ha), más Autorizaciones por conversión concedidas y no ejercidas hasta el 31.07.2016 (12.293 ha).
Seis.- Internacionalización y exportaciones del vino. En los últimos 30 años las exportaciones de vino en volumen se han multiplicado por 5,6, convirtiendo a España en el primer exportador mundial de vino. Todo ello, además, teniendo muy presente la menor superficie de viñedo que también viene registrándose, de forma lenta pero sistemática. En definitiva, el proceso de internacionalización del vino español es una clara y palmaria realidad que marca tendencia en el conjunto de las bodegas españolas, especialmente en el ámbito de las DOPs e IGPs. Las exportaciones envasadas de vino español, en el período enero-septiembre de 2016, crecen un 3,6 % en valor hasta casi los 1.200 millones €, mientras que caen en volumen un 1,7 %, hasta los 565 millones €.
Siete.-Cultivo y superficie ecológica. España es el primer país de la UE en mayor extensión de superficie dedicada al cultivo ecológico (1.968.570 ha), suponiendo el viñedo ecológico un porcentaje del 9 % sobre la superficie total de viñedo, con 95.591 ha y casi 400.000 toneladas de uvas de vinificación. Por CCAA, Castilla-La Mancha dispone de más de la mitad del viñedo ecológico de España con 54.512,80 ha.
Ocho.- El vino y la cadena alimentaria. El vino, como alimento natural y bebida destinada a ser ingerida por seres humanos en cualquier lugar del mundo, es un producto del sector primario agrícola, transformado o no. Tiene un valor y trascendencia innegable para la economía española, participando muy activamente en la formación del Producto Interior Bruto (PIB) español, en la dimensión de la balanza comercial, en el fomento y creación de empleo, de forma directa e indirecta, potenciando la dinamización y el desarrollo rural en España.
Nueve.- La trazabilidad del vino. El cuidado de la salud de los consumidores hace necesario asegurar la confianza de los mismos, con la adopción de las medidas y controles en todos y cada uno de los procesos de transformación y elaboración de los alimentos. La trazabilidad del vino consiste en la posibilidad de encontrar y seguir la huella o rastro a través de todas las etapas de producción, transformación y distribución del mismo, pudiendo seguirse hacia atrás, en función de la posibilidad de encontrar la huella hasta su origen y, hacia delante, hasta localizar su destino.
Diez.- El consumo del vino en España. El consumo de vino en España se ha reducido a la mitad en los últimos 25 años, con un consumo algo inferior a 20 litros por persona/año.Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) para el año 2015, arrojan un consumo per cápita de 17,25 litros por persona/año. Desde luego, se trata de datos muy por debajo de lo que sería adecuado para uno de los tres grandes países productores de vino del mundo (junto a Francia e Italia) y de larga tradición vitivinícola, cuyos consumos superan en más del doble al del consumo en España.
Once.- El sector bodeguero. En España hay alrededor de 4.000 bodegas, la mayoría de carácter familiar y pequeñas, encontrándose registradas como empresas exportadoras casi la totalidad de ellas. En general, tanto el conjunto de bodegas como el sector vitivinícola español se encuentra caracterizado, además de por su dispersión y atomización, por un sistema de propiedad, trabajo y gestión mayoritariamente propio de la pequeña explotación familiar, sin perjuicio de que hay un grupo cada vez más amplio y numeroso de bodegas que, además de expandirse por diferentes zonas vitivinícolas de España, se encuentran inmersas en plenos procesos de internacionalización.
Doce.- Quien sabe beber, sabe vivir. La producción y el consumo de vino gozan de una larga tradición y legado de nuestros ancestros y de la herencia europea. La UE es el mayor productor mundial de vino y también el principal exportador del mundo. El vino, cada vino, es único, y es apreciado por su sabor, textura, cuerpo, color, aroma y variedad, resultando un complemento ideal de una buena comida. Sin embargo, sólo consumiéndolo moderada y lentamente podrán apreciarse y disfrutarse de sus propiedades. Así pues, y de acuerdo con las directrices recomendadas de moderación para personas adultas, el vino es perfectamente compatible con una dieta equilibrada y con un estilo de vida saludable.
La campaña Quien sabe beber, sabe vivir, es una iniciativa del sector vitivinícola español, que se ha realizado en el marco de un programa cofinanciado por la UE y el Gobierno de España, con objeto de incrementar el conocimiento del vino y transmitir las pautas de consumo del mismo, ligadas al disfrute del mismo con moderación y destacando sus valores en nuestra cultura, nuestras tradiciones, el paisaje y la dieta mediterránea.